Una de las mayores sorpresas fue ver que el S6 no será completamente hecho de metal como se preveía: sólo la parte interna y los bordes son de metal, la parte trasera es de cristal.
La diferencia notable entre la versión EDGE de la normal son las esquinas más redondeadas en la versión de pantalla curva y el cuerpo de cristal. De esta forma, se elimina el conocido plástico que se utilizaba en la fabricación de los Samsung Galaxy S.
Samsung no pudo evitar realizar su primera comparación al iPhone de Apple de la noche al explicar que el metal de teléfono era 50% más fuerte que el usado por sus rivales.
Similar a los iPhone, es el hecho que ahora los parlantes están situados en la parte inferior del dispositivo.
El Samsung Galaxy S6 es un unibody (un solo cuerpo sin tapa) igual que los iPhone. La batería ya no puede ser sacada como sus antecesores y la tarjeta SIM debe ser insertada por una ranura en la parte lateral, insertando una aguja o alguna herramienta para abrirla. Los botones de volumen serán independientes (uno para bajar y otro para subir).
No podemos quejarnos de la apariencia del galaxy S6, es notablemente superior a sus antecesores, lo cual supone un acierto de Samsung en ese sentido.
Con el nuevo Android Lollipop 5.0 como sistema operativo nativo y algunas apps adicionales (además de la interfaz conocida Touchwiz) la fluidez del dispositivo es superior a lo que se pudo notar en lanzamientos de antecesores, guardando las diferencias entre peso de aplicaciones en épocas diferentes.
está compuesto de un procesador Exynos 7 de ocho núcleos y 64 bits que es un 20 % más rápido que el que está presente en el Note 4, de una memoria RAM de 3 gigas y de una capacidad de almacenamiento de 32 gibas (habrá versiones de 64 y 128 GB).
